¿Quién no conoce a la genial Mafalda, creada por Quino en 1962? Es imposible que haya alguien que durante los últimos cincuenta años no haya leído y disfrutado con cualquiera de las tiras o historietas ilustradas del creador de esa menuda mujercita tan inteligente o marisabidilla, pero contundente, lapidaria, que siempre fue la crítica y audaz Mafalda.
Quino, seudónimo de Joaquín Salvador Lavado, nacido en Mendoza (1932), Argentina, de ascendencia española e italiana, disponía de una frescura inusitada a la hora de plasmar las expresiones de sus jovencísimos personajes que deambulaban alrededor de Mafalda, con sus perplejidades o sus iras, sus muchas sorpresas e inteligentes dobles sentidos, mostradores siempre de las paradojas irreversibles que delineaban el contorno de nuestra sociedad del bien estar.
Últimamente lo he recordado por un par de coincidencias que, aparentemente, no tenían relación: encontré traspapelada la viñeta Desayuno que dibujó Quino hace años a partir de un sutil texto de Jacques Prevert, donde, como se comprobará, planteaba un mundo abierto de interpretaciones: pero, casi todas ellas, nos llevan a plantear la honda incomunicación y el abandono que rodea a algunas parejas.
Y otra tira que me vino a la mano, rebuscando cosas: la conversación genial que tiene Mafalda con su chiquitiiiiita amiga Libertad, cuando se conocen.
He puesto en contacto el contenido de ambas tiras, de tiempos y concepciones diferentes, y he sacado mis conclusiones. A ver si ustedes quieren jugar al mismo juego...
Por si no lograran descifrar bien los textos, aquí van:
Desayuno
Echó café en la taza
Echó leche en la taza de café
Echó azúcar en el café con leche
Con la cucharilla lo revolvió
Bebió el café con leche. Dejó la taza sin hablarme
Encendió un cigarrillo. Hizo anillos de humo
Volcó la ceniza en el cenicero
Sin hablarme. Sin mirarme
Se puso de pie. Se puso el sombrero
Se puso el impermeable porque llovía
Y se marchó bajo la lluvia
Sin decir palabra
Sin mirarme
Y me cubrí la cara con las manos
Y lloré
Libertad es chiquitita
¡Hola! ¡Qué chiquitita sos! ¿Cómo te llamás?
Libertad
[silencio de Mafalda, quien observa detenida a Libertad]
¿Sacaste ya tus conclusiones? [dice Libertad muy enfadada] Todo el mundo saca su conclusión estúpida cuando me conoce
[Silencio, sonrojo y mosqueo de Mafalda]
Pasa el tiempo y dejas pasar, creyendo que no te leen... He de rectificar, gracias a Octavio, lo dicho más arriba sobre el autor de Mafalda y "Desayuno". Aquí hago justicia a su ilustrador, El Negro Caloi, tan valioso y prolífico como Quino. Pero al César lo que es del César... Gracias a Octavio, me he decidido hoy a remediarlo. Aquí va...